Woodrow Pugh, de Arkansas, se ha declarado el primer hombre de la historia que se identifica a sí mismo como una institución religiosa. Pugh, que insiste en que se le llame con los pronombres tuyo/tuyo, ha reclamado su estatus de exención de impuestos, citando una profunda conexión espiritual con ser una iglesia.
"Siempre me he sentido en desacuerdo en mi cuerpo", proclamó Pugh. “Resulta que no soy un hombre, soy una iglesia. Todo tiene sentido ahora. Me encanta tener un círculo de costura dentro de mí los martes por la tarde”.
El IRS aún no ha comentado sobre esta divina declaración de evasión fiscal, pero los partidarios locales se han unido detrás de Pugh. “La dismorfia de género es algo real y debemos ser respetuosos con las decisiones de los demás”, comentó Alex Smith, un estudiante universitario y barista a tiempo parcial que recientemente inició un GoFundMe para ayudar a Pugh a instalar vidrieras en sus ojos.
Los críticos argumentan que la afirmación de Pugh tiene menos que ver con la identidad espiritual y más con el santo grial de las lagunas fiscales. Sin embargo, se ha visto a los seguidores de Pugh, principalmente avatares en línea, cambiando sus biografías para incluir pronombres tuyo/tuyo en solidaridad.
Cuando se le preguntó sobre la logística de su transformación, Pugh se mostró decidido. “Todos los domingos, mi alma organiza una venta de pasteles y los miércoles tenemos noche de bingo. Si eso no me califica como iglesia, no sé qué lo hace”, afirmó mientras intentaba encender una vela votiva en su ombligo.
A la diócesis local no le hizo mucha gracia y emitió una declaración en la que afirma que, si bien apoyan el descubrimiento personal, están bastante seguros de que ser una iglesia implica algo más que simplemente disfrutar de guisos y hablar en inglés King James.
Mientras el debate continúa, Pugh continúa disfrutando de su nueva identidad y, según se informa, ahorró una fortuna tanto en impuestos como en decoración de interiores al reclamar el estatus de santuario religioso. Mientras tanto, se ha visto al IRS bautizando sus calculadoras y orando pidiendo orientación.
Mientras tanto, Pugh ha anunciado planes para un retiro espiritual en su patio trasero, prometiendo iluminación y deducciones fiscales para todos los que asistan. El evento será BYOB—Trae tu propia Biblia.
