Arrestan a madre en Pensilvania por aceptar sobornos de campaña de Trump

KITTANNING, PA – Una madre de tres hijos fue arrestada después de pagando sus compras con una donación de campaña ilegal del candidato presidencial Donald Trump.

La mujer estaba comprando para sus tres hijos cuando Trump, quien también estaba comprando para sus tres varones, intervino para ofrecerle un subsidio gubernamental para sus compras de comestibles.

“Mira, va a bajar un poco”, dijo Trump jovialmente mientras desperdiciaba el dinero. “¡Ha bajado cien dólares!”, añadió Trump, refiriéndose a su propia cuenta bancaria.

Momentos después de que el expresidente saliera de la tienda, la madre fue derribada al suelo por un agente del IRS que pasaba por allí.

El agente le exigió que pagara los impuestos correspondientes por su ganancia inesperada, pero la madre le explicó que como ya había gastado el dinero en comestibles, lo mejor que podía ofrecerle era un par de plátanos.

Un agente de la Comisión Federal Electoral que pasaba por allí abordó al recaudador de impuestos y le explicó que la Comisión Federal Electoral tenía jurisdicción sobre el IRS en esta situación. Después de un breve altercado, se resolvió el asunto y se decidió que la madre recibiría todo el peso de la ley por aceptar un soborno político.

Se incautaron como prueba tres docenas de huevos, dos barras de pan y otros productos comestibles, que probablemente se presentarán en el juicio del próximo jueves. A la acusada también le congelaron sus cuentas para evitar cualquier manipulación política.

Trump estaba de visita en Kittaninnining, Pensilvania, de camino a una asamblea municipal en Smithton, donde se peleó con un ciervo. Un momento, no, "Deere", perdón, quiere aumentar los impuestos a John Deere si trasladan su producción a México. Él no está luchando contra ningún animal..

Antes de dirigirse a un mitin en Indiana (no en el estado), Trump pasó junto a un cartel que anunciaba la tienda de comestibles local, 'Sprankles', y comenzó a gritar: '¡Sprankles! ¡Sprankles! ¡Sprankles!', hasta que el conductor se detuvo a comprar palomitas de maíz.

Después de gastar $100 en una bolsa de palomitas de maíz y un voto, Trump no es el único republicano que paga de más en comestibles esta semana: JD Vance gastó recientemente $4 en huevos de $2.

Los demócratas también hicieron una parada en la campaña electoral, al detenerse en una gasolinera de Pensilvania, 'Sheetz', el mes pasado. En un esfuerzo por atraer a los votantes de la clase trabajadora, el gobernador Tim Walz distrajo al empleado mientras la vicepresidenta Kamala Harris robaba seis bolsas de Doritos de tamaño familiar.