Trump acuerda un acuerdo de mil millones de dólares con Arabia Saudita para la venta de chips y las acciones de Frito-Lay se disparan.

El presidente Donald Trump anunció hoy un acuerdo de miles de millones de dólares en papas fritas "tremendo, absolutamente delicioso" con Arabia Saudita, no por semiconductores, pero para comer patatas fritas.

Hablando desde un podio improvisado en el palacio saudí, rodeado de bolsas de Dorito bañadas en oro, Trump declaró: «Los saudíes querían papas fritas. Tenemos las mejores. Frito-Lay, una empresa fantástica. Nadie hace Cool Ranch como Estados Unidos lo hace».

Trump: “¿Cómo puedo hacer que esto sea rentable para Frito-Lay?” 

Inicialmente, la confusión estalló en Wall Street, donde las primeras operaciones sugerían que los saudíes estaban invirtiendo en fábricas de semiconductores. Nvidia se disparó, AMD se vendió en corto hasta desaparecer, y Elon Musk tuiteó: «Me encantan las patatas fritas», antes de aclarar que se refería a «las de IA, no las de snack, aunque sí disfruto de un buen Flamin' Hot».

Para cuando se hizo evidente que las "papas fritas" eran comestibles, con queso artificial espolvoreado, las acciones de Frito-Lay ya habían superado su máximo histórico y se habían disparado. Los analistas describieron la situación como "Crunchflation", un término inventado por un becario de la CNBC en directo.

Declaración saudí: “Teníamos hambre”

En un comunicado oficial, el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, confirmó el acuerdo: «Estábamos viendo Succession sin parar y nos dimos cuenta de que nuestro plato de patatas fritas estaba vacío. Era una emergencia nacional. Trump respondió a la llamada».

El acuerdo incluye acceso exclusivo a sabores experimentales previamente considerados "demasiado inestables" para el consumo público, como "Sriracha Unicorn Dust" y "Freedom BBQ IV: Liberty Sauce". Fuentes cercanas al acuerdo afirman que el Príncipe solicitó personalmente "lo que fuera que Taco Bell ofreciera en 2017".

Wall Street reacciona con migajas

La noticia dejó a los mercados conmocionados. Los futuros de Cheetos se dispararon. La moneda Tostitos superó brevemente a Dogecoin en capitalización de mercado antes de desplomarse bajo el peso de su propio optimismo.

Mientras tanto, un grupo bipartidista de legisladores estadounidenses convoca a una Cumbre de Snacks de emergencia para regular el sector tecnológico de snacks. El senador Bernie Sanders emitió un comunicado que decía: «Una vez más, los multimillonarios acaparan el sabor mientras los estadounidenses trabajadores se conforman con comida sencilla cocinada en olla».

Trump busca expansión

Cuando se le preguntó si esta diplomacia de las papas fritas podría llevar a más acuerdos de política exterior basados ​​en snacks, Trump sonrió, revelando lo que pudo haber sido un solo trozo de nacho entre sus dientes. "Estamos en conversaciones con Corea del Norte. A Kim le encantan las Pringles. Va a ser un éxito".

Para más información sobre esta historia, lea aquí: Frito-Lay sufre un golpe de 5.5 millones de dólares tras la prohibición de Trump a la exportación de patatas fritas.